Rafapal: periodismo planetario

Hace ya tiempo que no puedo ver las noticias sin una cerveza en la mano. Sí, me gusta la cerveza, pero esta adicción que he desarrollado tiene otras causas. Creo que lo “amargo” compensa la amargura que me produce contemplar el horror que uno ya sabía que iba a suceder; de alguna manera, la cerveza es mi medicina. Contemplarlo y no poder hacer nada para detenerlo... ¿O sí?. Seguramente, escribir estas líneas es lo único que puedo hacer. Pues allá voy!!!

Si hay algo realmente positivo del trascendental momento que estamos viviendo es que puede hacer que muchos se atrevan a plantearse cosas que LA COARTADA NAZI les impedía afrontar. Por ejemplo, la investigación de la cuestión judía durante la segunda guerra mundial. Si leéis la página siguiente: http://www.strike-the-root.com/62/johnson/johnson2.html os enteraréis de que la ingente cantidad de millones que el estado de Israel sigue recibiendo de Alemania a cuenta de ese hecho que NO SE PUEDE INVESTIGAR y que es el origen del grandísimo armamento que están empleando para asesinar a palestinos y libaneses. Interesante, verdad?

La evidencia de la maldad intrínseca del estado de Israel, que se atreve a bombardear a todos los terrícolas (eso es, ni más ni menos, lo que hizo hace dos días al atacar las fuerzas de la ONU) está haciendo que entre la gente de izquierdas de habla inglesa se esté produciendo un intensísimo debate sobre los periodistas e intelectuales que omiten hablar de Israel cuando analizan el PODER, con mayúsculas. Noam Chomsky y el citado hace unos días, Greg Palast, autor de “Toda la democracia que el dinero puede comprar” están en el punto de mira de esta purga de “infiltrados” dentro del “progresismo”.

Los medios de comunicación más punteros en Internet de habla inglesa están llegando TODOS a la misma conclusión que el estudio de un par de profesores de universidad norteamericanos: ISRAEL CONTROLA LOS ESTADOS UNIDOS, y no viceversa, como todavía muchos ingenuos de izquierda piensan. Entrad en http://www.rense.com/general72/oer.htm y sabréis más. Por cierto, que muchos de estos estudiosos son judíos, como Israel Shamir y los judíos contra Israel (www.jewsagaintsisrael.com ) o los naturei karta porque la cuestión no es sólo el pueblo judío sino con el sionismo, en el que participan muchos cristianos.

El resumen es ya más que evidente, los grupos de presión (lobbys) judíos controlan tanto a los republicanos (vía los telepredicadores evangélicos) como a los demócratas (Lieberman, Kerry y Hillary RODENDURST Clinton son judíos). Las bravuconas palabras de Ariel Sharon en una entrevista radiofónica de hace unos años cuando le preguntaron si no temía la reacción de Estados Unidos ante uno de sus habituales ataques a Palestina: “¿Por qué voy a temerlo? Nosotros controlamos los Estados Unidos”, han resultado completamente verdad. Estados Unidos ha dado vía libre al asesinato perpetrado por Israel contra el pueblo árabe; Estados Unidos es sólo un apéndice del estado de Israel.

Y nosotros, en este mundo judeocristiano, salvo que uno viva en Cuba o Venezuela (y me pregunto hasta qué punto) estamos del lado del agresor, por la sencilla razón de que nuestros medios de comunicación (y nuestros bancos) están controlados por los mismos grupos. Por eso, uno se horroriza cuando enciende la televisión y ve la información de Telemadrid o de Antena 3 o de el periódico El Mundo o de El País (sólo puede soportarlo con una cerveza). Claro, que si uno sabe que la presidenta de la comunidad, Esperanza Aguirre, no hace más que viajar a Israel... Si uno repara en que apellidos como Cymerman (corresponsal de Antena 3 en Oriente Medio), Wurgaft (El Mundo), Sapag (Telemadrid) son hebreos, entonces comienza a entender... (Y eso que no conocemos los apellidos del Consejo de Administración de esas empresas).

Uno entiende por qué pretenden mostrar el conflicto de una manera NEUTRAL, es decir, que a los ochenta cohetes katyusa lanzados por Hezbollá (reparad en que siempre los cuentan), Israel ha respondido ELIMINANDO (jamás dicen matando) enclaves de la guerrilla chiíta. De esa manera, convierten una invasión unilateral en un conflicto entre dos ejércitos, una guerra, y no una agresión de un país a otro, o más, bien, de una civilización contra otra.

Reparad por un momento en cómo empezó todo esto: Israel respondiendo al SECUESTRO de dos de sus soldados (eso es lo que nos han contado los medios de comunicación en nuestro mundo... judeocristiano; no hemos oído a los árabes). Analicemos el valor de esta palabra por un momento:

-La guerrilla chiíta SECUESTRA dos soldados israelíes.

-La guerrilla chiíta CAPTURA a dos soldados israelíes.

-La guerrilla chiíta DETIENE a dos soldados israelíes

Si os fijáis, la acción es la misma (retener a unos soldados enemigos), pero entre el SECUESTRO y la DETENCIÓN media un trecho: la legalidad (esa legalidad que Israel se pasa por el forro de los cojones). Si Hezbolla hubiera cruzado la frontera, sería un secuestro y si hubiera ocurrido en territorio libanés, sería una detención. Bueno, pues muchas informaciones indican que el suceso tuvo lugar en territorio libanés, lo que tiene más lógica porque a los chiítas no les interesaba lo más mínimo entrar en guerra con un estado tan poderoso, mientras que a Israel, SÍ. En esta página, creo que creada por agentes secretos norteamericanos, os podéis enterar de más cosas que los medios de comunicación no os cuentan acerca de cómo empezó todo: http://judicial-inc.biz/L_e_banon_7_12_2006.htm

Pero lo que ninguna televisión del mundo judeocristiano os va a mostrar lo que vais a encontrar en esta página, algo duro de verdad (http://www.fromisraeltolebanon.info/ , ¡ojo!, hay veces que no se puede entrar). Sólo os mandaré un anticipo, las fotografías de unas niñas judías escribiendo sobre las bombas “De los niños de Israel, a los niños del Líbano”. Decidme si, alguna vez, el ser humano ha alcanzado tal degradación. Reflexionad si la NEUTRALIDAD no es cómplice de estos degenarados. Decidme si no dan ganas de llorar, de tomarse mil cervezas para olvidarse...

Para terminar, y para los que todavía se pregunten por qué los grupos cristianos protestantes apoyan a Israel de una manera tan RADICAL, os propongo que reparéis en algunos detalles. Testigos de JEHOVÁ, Mormones y cristianos evangélicos celebran, a diferencia de los católicos, el día SÁBADO, y el SABATH, curiosamente, es la festividad de los judíos. El SABATH también era, por cierto, la festividad de las brujas y de los cultos satánicos.